domingo, 28 de agosto de 2022

PORQUÉ DISFRUTAMOS TANTO DEL YACIMIENTO DE KELIN

La historia (y parte de la prehistoria) de la Humanidad es también la historia de las ciudades. Algunas llevan en pie y habitadas desde hace unos 7000 años. Este sería el caso de Byblos, en Líbano. Otras muchas se han perdido en las arenas del tiempo y de vez en cuando logramos encontrarlas. En esta categoría estaría Kelin, en el yacimiento arqueológico de los Villares, a las afueras de Caudete de las Fuentes (Valencia). 

El yacimiento arqueológico de Kelin

Hace unos 10000 años surge la agricultura en Oriente Próximo. Esta manera de producir alimentos es la revolución más importante que ha vivido la Humanidad. Ya no hay que trasladarse para encontrar comida, la comida está donde querían. Esto propicia otros muchos cambios. En primer lugar la creación de asentamientos estables: las aldeas y ciudades. Como no se precisa de toda la comunidad para encontrar alimento, algunos miembros se especializan en distintos oficios. Así hay quien empieza a especializarse en elaborar cerámica, o tejer telas, por ejemplo.

Pero, ¿qué es Kelin? Era una ciudad en el interior de la actual provincia de Valencia que podría asimilarse con la capital de su territorio. Un territorio que se asimilaría con la comarca de Utiel-Requena, o Tierra Bobal, que es su marca turística y de la que después hablaremos. 

KELIN, AYER Y HOY


El yacimiento arqueológico de Los Villares oculta parcialmente la ciudad íbera de Kelin y se encuentra a las afueras de Caudete de las Fuentes. Es accesible casi directamente desde la autovía A3, que comunica Valencia con Madrid. Nuestro consejo (y el de los responsables de Kelin) es que no hagáis caso al GPS ni a Google Maps (sobre todo a Google Maps) . Entrad a Caudete para llegar mejor a Kelin y así evitaréis una pista de tierra. 

Por las diversas catas que se han realizado, se estima que Kelin tenía una extensión de unas diez hectáreas. Se calcula que podrían vivir en su momento de máximo esplendor alrededor de 4000 personas. Como hemos comentado anteriormente, sería la capital de su territorio y administraría varias poblaciones a su alrededor. Se cree que se fundó allí por su posición estratégica. Está cerca del río Cabriel y en un cruce de caminos. Por un lado una vía que uniría la costa con el interior, y por otra parte, una vía que comunicaría Andalucía y Aragón por el interior. Estas rutas permitirían el comercio de múltiples materias: productos agrícolas (del interior) con pescado y objetos exóticos de origen fenicio (en la costa), y metales (Andalucía y Aragón). 

La investigación ha determinado que Kelin tuvo una vida de unos 700 años, más o menos hasta el 75 o 72 a. C. cuando las guerras Sertorianas (una guerra civil por el control de Roma) aceleraron su declive y se abandonó definitivamente. Entre el siglo III o II a. C., durante la II guerra púnica, sufrió un importante incendio que destruyó bastantes edificios. Fue tan importante que incluso acuñó moneda. Por eso conocemos que esta ciudad se llamaba Kelin. 

¿QUÉ HACÍAMOS EN KELIN?


El yacimiento arqueológico de Kelin

Acudimos a Kelin con un triple propósito. Sí, triple. Una tarde más que completa. En primer lugar visitamos el propio yacimiento. El plato fuerte venía al anochecer, cuando se realizó una observación astronómica junto a la Asociación Valenciana de Astronomía (AVA). Por último se hizo un taller de Light Painting. Pero vayamos por partes.

En el yacimiento de Los Villares se puede ver dos zonas donde se ha excavado y se ha puesto en valor las construcciones que se han encontrado. En la parte más alta del yacimiento, que tiene una pendiente hacia Caudete, se pueden ver varias viviendas, entre ellas las de unos comerciantes ricos. La arqueóloga responsable explicó que encontraron acopios de distintos materiales, lo que hace pensar que comerciaban con elementos cerámicos, entre otros. Además localizaron un molino, un taller metalúrgico y una bodega, elementos que no eran frecuentes en todas las casas. Lo que no se puede saber es si era comunal, pero no lo parece.

En la parte baja se encuentra el segundo espacio excavado y puesto en valor. Aquí fundamentalmente se pueden ver los restos de una casa agricola de unos 100m2. Esto demuestra una posición económica holgada, pero no eran tan ricos como en la casa de la que acabamos de hablar. Estaba en la esquina de dos calles, y colocaron una piedra para proteger la esquina exterior de conductores de carros poco mañosos. Se puede observar también una ampliación. Algunos muros se realizaron con ladrillos macizos de barro y enlucidos con cal. Probablemente tuvo una cubierta de vigas de madera, ya que localizaron restos. También se encontraron unos enterramientos infantiles. Se sabe poco acerca de las creencias de los íberos, pero sí que se conoce que enterraban a los primogénitos muertos en tinajas en la casa para que fueran sus protectores. 

SESIÓN DE NOCHE


El yacimiento arqueológico de Kelin

Mientras la noche iba cayendo, los asistentes aprovechamos para cenar. El atardecer fue muy bonita, con el sol poniéndose entre las montañas que rodean el yacimiento. De vez en cuando veíamos pasar el AVE, cuyas vías están también muy cerca del yacimiento de Los Villares. 

La observación astronómica se dividió en tres partes. En primer lugar explicaron en qué iba a consistir. Inmediatamente, y para que nos fuéramos acostumbrando a la oscuridad (cuanto más oscuro, mejor) hicieron un pequeño juego. Éste consistía en intentar adivinar la distancia (a escala) que separa la Tierra de la Luna. Después el mismo juego pero con los satélites o las estaciones espaciales que orbitan nuestro planeta. Esto nos permite estimar lo que suponen las distancias siderales. Y que somos menos que una mota de polvo para el universo. 

El yacimiento arqueológico de Kelin

La segunda parte de la observación fue una explicación de las constelaciones. Se ponían en contexto las características de cada una, como por ejemplo si eran estrellas son dobles (¡como en Tatooine!), si hay un cúmulo (algunos con millones de estrellas) o la distancia media a la Tierra. También contaban la historia mitológica alrededor de la constelación. Una gozada. Apuntaban con un láser verde, uno de esos que algunas personas con pocas luces utilizan para molestar a aviones en vuelo. 

La última parte correspondía con la observación a través de los telescopios que llevaron los y las miembros de la AVA. Así vimos más de cerca algunas de las estrellas dobles o cúmulos de los que nos habían hablado. Uno de los momentos más chulos fue cuando vimos Saturno, y por supuesto sus anillos. Empezó a verse al anochecer y antes de la medianoche estuvo a una altura suficiente para observarlo. 

DISFRUTANDO DEL CIELO NOCTURNO


Disfrutamos un montón porque, por fortuna, no había una sola nube. Además aprendimos varias cosas acerca de las observaciones. Ahí van algunos consejos. En primer lugar hay que alejarse de las ciudades, la contaminación lumínica nos impide ver objetos en el cielo nocturno. A simple vista vimos distintos satélites o la estela de un bólido entrando en la atmósfera. Utilizad luz roja (nosotros cubrimos unas linternas con celofán rojo) solo cuando sea imprescindible y siempre dirigida hacia el suelo. Si no habrá que volver a acostumbrarse a la oscuridad. No hace falta un equipo muy caro, unos prismáticos medianamente buenos pueden bastar para disfrutar del cielo. Claro, cuanto mejor sea el equipo más elementos podremos ver. Eso sí, generalmente serán en blanco y negro, los colores que se aprecian en las fotos astronómicas o bien son artificiales, o precisan de unos tiempos de exposición muy grandes. 

Al mismo tiempo que observábamos el cielo se realizó un taller sobre Light Painting. Esta es una técnica fotográfica en la que se abre el diafragma de la cámara durante un tiempo bastante elevado. Mientras, con distintos elementos luminosos, se puede realizar dibujos. De ahí el nombre. Es una técnica muy chula y muy curiosa. No es fácil, pero con un equipo adecuado, tampoco el muy complicado.

SE QUEDÓ BUENA NOCHE EN KELIN


El yacimiento arqueológico de Kelin

Pudimos disfrutar de todas estas actividades de manera gratuita gracias a Tierra Bobal, que es la marca turística de la Mancomunidad del Interior Tierra del Vino, una entidad que agrupa los municipios de la comarca de Utiel-Requena. Tienen una web llena de planes para toda la familia. El nombre proviene de la uva autóctona de la zona, la bobal, y que ha sido fuente de riqueza desde hace siglos. Ya habéis visto que en Kelin elaboraban vino. Además este vino tiene Denominación de Origen Protegida, y la verdad es que está muy rico. 

Sus cielos tienen la certificación Starlight, es decir, que una entidad ha certificado que sus cielos reúnen las condiciones necesarias para poder realizar observaciones astronómicas de calidad. Es decir, cielos con poca contaminación lumínica, nitidez y suficientes horas de ausencia de nubes al cabo del año para asegurar buenas observaciones astronómicas. Esta certificación la disfrutan en varios puntos de España, y es sinónimo de cielos de calidad.

En resumen, fue una tarde-noche que nos permitió viajar lejos, tanto en el tiempo como en el espacio. En el tiempo porque nos trasladamos a una ciudad que hace siglos que dejó de existir, y que se ha rescatado. Además fue un viaje en el espacio, en el sentido más amplio de la palabra. Nos acercamos a estrellas que están a 30.000 años/luz de nosotros. Es decir, esa luz se emitió cuando el ser humano no conocía todavía ni la agricultura ni la ganadería. 


Una noche como esta ayuda relativizar muchas cosas. Somos muy insignificantes para el universo y para la historia. Lo mejor es asumirlo. También permite que nos demos cuenta de que hay que aprovechar la vida y disfrutar cuanto se pueda. Y mirar al cielo es una pequeña gozada. 

jueves, 18 de agosto de 2022

3 PISCINAS NATURALES PARA REFRESCARSE EN LA COMUNIDAD VALENCIANA

Estamos viviendo uno de los veranos más tórridos de las últimas décadas. Las temperaturas llevan semanas absolutamente disparadas. Eso ha hecho que no hagamos más que buscar lugares donde sobrellevar lo mejor posible el calor. Las piscinas naturales son especialmente convenientes para conseguirlo. Al frescor del agua se une el entorno natural, que ayuda a que las temperaturas sean más bajas y, por lo tanto, mucho más soportables.

Piscinas naturales en la Comunidad Valenciana


En este post vamos a recomendaros 3 piscinas naturales en la Comunidad Valenciana. Una en cada provincia. No son las únicas, ni mucho menos. Por suerte en la Comunidad Valenciana tenemos la enorme suerte de disfrutar de un montón de estos espacios naturales. Tras el confinamiento provocado por la pandemia del Covid-19 y la necesidad de encontrar lugares donde hubiera una cierta distancia entre las personas, las piscinas naturales sufrieron una saturación de visitantes. Eso hizo que muchos ayuntamientos, en su mayoría de poblaciones poco habitadas y con pocos medios para poder controlar las avalanchas de público, decidieran establecer un aforo estos espacios y cobraran una entrada para afrontar los gastos sobrevenidos.

Como podréis comprender estos aforos eran completados a primera hora de la mañana. Así que o bien se acudía pronto o se corría el riesgo de tener que vagar de piscina en piscina buscando un hueco. No hace falta decir era imposible encontrar sitio.

Para aprovechar el día os recomendamos que os llevéis unos bocatas (o la comida que creáis conveniente). También el uso de cangrejeras o escarpines para evitar resbalones o cortes con alguna piedra. El día debe ser para disfrutar y no para que acabe en un centro de salud.


LAS FUENTES DEL ALGAR (CALLOSA D’EN SARRIÀ, ALICANTE)



En la comarca de la Marina Baixa, cerca de Benidorm, se encuentran las Fuentes del Algar. Este paraje natural es el lugar donde nace el río Algar, un río bastante corto, solo 12 kms. Éste desemboca en la vecina Altea.

Estas fuentes tienen como elemento más destacado una cascada que cada año inmortalizan en fotos miles de visitantes. Unas escaleras bastante empinadas llevan a una serie de pozas, tanto naturales como artificiales. Una está formada por una pequeña presa que se construyó para aprovechar las aguas para riego. Todavía existe un canal, ahora en desuso y que se utiliza como salida del paraje.

Piscinas naturales en la Comunidad Valenciana

La entrada en temporada alta (del 15 de junio al 15 de octubre) cuesta 5 € para adultos, 4 para jubilados o mayores de 65 años, 2 € para niños entre 4 y 10 años y es gratuita para menores de 4. Las personas con discapacidad entran gratis, pero si tenéis problemas de movilidad no os lo recomendamos.

Hace tiempo ya dedicamos una entrada en el blog a este lugar. Nuestro consejo es, si vais en temporada alta, aprovechad la infraestructura de los restaurantes que se han ido abriendo a lo largo de los años.


En la zona también hay un camping y el parque temático Dinopark, que como podréis imaginar tiene en los dinosaurios su razón de ser.


RÍO CHELVA (CHELVA, VALENCIA)


Piscinas naturales en la Comunidad Valenciana

En la comarca valenciana de Los Serranos nace el río Chelva, en la localidad de Chelva, precisamente. Este río es un afluente del Turia.

El mejor lugar para disfrutar de un reconfortante baño es el Área recreativa Molino Puerto. Aquí encontraréis una zona con aparcamiento, mesas de picnic, baños, zona de barbacoa/paelleros y bar. A unos diez minutos andando llegaréis a la denominada Playeta (o Playa Continental). Es una poza de unos XX . Está junto a un cañón por el que baja el río Chelva. Muchos bañistas ascienden por este cañón para explorar el río. Es una zona muy bonita y vale mucho la pena. También os podéis cerca de la presa de Oliches, tras atravesar un túnel, o en el tramo del río entre La Playeta y el área recreativa.


Además de la visita veraniega para refrescaros en el río, el resto del año se puede realizar la Ruta del Agua. Es una ruta senderista circular que comienza en el centro de Chelva y recorre el río. Tiene una longitud de algo más de 7 km.

La entrada a La Playeta y Olinches cuesta 1 euro por persona, mientras que la tarifa de parking para coches y furgonetas es de 5 € (dos en horario de tarde). Pero nosotros llegamos cerca de la hora de comer y no pagamos nada. Nadie nos pidió dinero, ni por aparcar ni por entrar a la zona de baño.


FUENTE DE LOS BAÑOS (MONTANEJOS, CASTELLÓN)


Piscinas naturales en la Comunidad Valenciana

Por el interior de la provincia de Castellón discurre el río Mijares, que nace en la provincia de Teruel. Al llegar a Montanejos el río cobra una inusitada vida. Parte de la culpa la tiene la Fuente de los Baños. En este punto hay un manantial con dos características muy especiales. En primer lugar que los minerales disueltos en el agua tienen propiedades beneficiosas para la piel. Esta peculiaridad se conoce desde hace siglos, tanto que se cree que hay en la zona unos baños de época andalusí. De hecho en 1863 se declararon de Utilidad Pública.


La otra característica es que durante todo el año el agua surge a una temperatura constante de 25ºC. Es curioso bañarse en este río y que se combinen las corrientes frías con las calientes que surgen del manantial.

La entrada general cuesta 3 € si las adquirís por internet o 3,50 € si lo hacéis directamente en taquilla. Para los menores de 10 y mayores de 65 la entrada cuesta 2 €, mientras que los menores de 4 entran de manera gratuita. Si estáis en un alojamiento de Montanejos (algo muy recomendable) también entraréis gratis.



Piscinas naturales en la Comunidad Valenciana

Si queréis profundizar en este tema os recomendamos el libro “Tolls i salts d’aigua valencians” (Charcas y cascadas valencianas) del escritor Agustí Hernández, especialista en espacios naturales en la Comunidad Valenciana y que ya ha publicado varios. Todos están escritos en valenciano. También podéis seguirle en sus redes sociales.

Ahora solo queda explorar estos espacios naturales. Siempre con respeto hacia la naturaleza que nos rodea. Parece obvio, pero nunca está de más recordar que no hay que dejar basura abandonada y mucho menos provocar un incendio, ya sea por acción u omisión. Disfrutar del verano es fácil, mucho más si estamos fresquitos.

lunes, 8 de agosto de 2022

5 CONSEJOS PARA HACER TURISMO EN NUESTRAS PROPIAS CIUDADES

Todavía recordamos que había personas , familias enteras, que se iban de vacaciones del 1 al 31 de agosto. Año tras año su rutina era desplazarse a un lugar vacacional. Las sucesivas crisis que conllevaron una pérdida de poder adquisitivo de esas familias propiciaron un recorte de esas vacaciones. Incluso se llegó a hacer turismo en su propio domicilio.

CÓMO HACER TURISMO EN NUESTRAS PROPIAS CIUDADES

No son pocas las personas que prefieren aprovechar su ciudad en periodos vacacionales porque la huida hacia playas y destinos de interior hace que sean más manejables. Menos tráfico, menos atascos, más espacios libres en general. Este es un fenómeno más intenso en grandes ciudades.

Partimos de la base de que consideramos que conocer nuevos destinos es fantástico. Pero aprovechar la menor ocupación de tu propia ciudad para hacer turismo es una buena oportunidad para descubrir (o redescubrir) aquello que el día a día no nos permite.


Es típico el ejemplo de la cantidad de habitantes de Madrid que no conocen el Museo del Prado. Pero estamos convencidos de que hay ejemplos similares en la mayoría de ciudades. Nosotros, por no ir mucho más lejos con el ejemplo, tenemos una lista con lugares que visitar y hay varios de nuestro ámbito más cercano.

Para aprovechar mejor la oportunidad que ofrece vamos a daros 5 consejos que seguro que os serán muy útiles.

OLVIDAD RUTINAS


CÓMO HACER TURISMO EN NUESTRAS PROPIAS CIUDADES

Quizás por obvio nunca está de más recomendar que si estamos de vacaciones deben de ser de (casi) todo. Dejemos por un tiempo, aunque sea breve, algunas tareas rutinarias que no son del todo necesarias. No decimos que os abandonéis a la absoluta anarquía, pero pensad en aquello que no es necesario hacer ahora mismo, aquello que puede esperar.

Al fin y al cabo son vacaciones. Aunque nos quedemos unos días en casa hay que seguir disfrutando. Una cosa que no quite la otra.

UTILIZAD EL TRANSPORTE PÚBLICO Y ANDAD



Generalmente el transporte público es la mejor manera de conocer una ciudad. Si sois usuarios habituales probad a cambiar de línea o de medio de transporte. Si tenéis abono aprovechadlo, claro.

Otra de las maneras de descubrir (redescubrir) una ciudad es caminando. Patear por aquellos barrios por donde no soleis hacerlo. Y mirad alrededor. Y hacia arriba. Las prisas del día a día nos impiden fijarnos en pequños detalles que nos pasan desapercibidos. Seguro que se abre ante vosotros una nueva ciudad. Un balcón con una reja finamente labrada. Una cúpula adornada con cerámica que remata un edificio. Una curiosidad que nos sorprende.

También es un momento ideal para patear barrios que no soléis visitar. Ya sabéis que las modas cambian y que de vez en cuando hay un no sé, llamemosle algo, que hace que un barrio se ponga de moda. Si hace tiempo que no lo recorréis quizás sea el momento de volver.

CONSULTAD LAS AGENDAS CULTURALES


CÓMO HACER TURISMO EN NUESTRAS PROPIAS CIUDADES

La mayoría de los ayuntamientos publican agendas culturales con las actividades programadas. En estas agendas se recogen las exposiciones en marcha, los conciertos, las obras de teatro, las sesiones de circo o las proyecciones de cine. En verano, además, muchas localidades programan estas actividades al aire libre para intentar aprovechar el frescor nocturno. Porque cuentan los más mayores que en algunos lugares por la noche en verano incluso hace fresquito.

Estas actividades nocturnas nos dan las excusa, además de aprovechar para cenar fuera. Quien sabe, también podéis aprovechar para probar ese sitio del que habéis oído hablar. Sin el apuro del día a día y con tiempo libre quizás es el momento adecuado.

INSPIRAOS EN WEBS, BLOGS Y REDES SOCIALES



¿No sabéis que visitar? Bueno, tal vez necesitéis un poco de asesoramiento. Somos decenas (por no decir cientos) de travelblogs con un montón de sugerencias. Seguro que descubrís algún lugar que os llama la atención. Además hay para todos los tipos de viajeros: los que viajan en familia (como nosotros), los que mochilean por el mundo, los que prefieren las actividades culturales…

En nuestras redes sociales también hay un montón de consejos y de ideas. Se suelen acompañar de fotos, para que todos nos podamos hacer una idea de a que nos referimos. Muchos lo hacemos sin ningún tipo de contrapartida, únicamente es nuestro hobby y nos encanta compartir nuestras experiencias.

También podéis dirigiros a la Oficina de Turismo de vuestra localidad donde os podrán dar buenas sugerencias. Allí conocen perfectamente todas las posibilidades turísticas del municipio y os sabrán guiar. El juego entre lo que os recomiendan y lo que sabéis o queréis hacer también puede ser interesante.

TAN CERCA, TAN LEJOS


CÓMO HACER TURISMO EN NUESTRAS PROPIAS CIUDADES

Si tu ciudad se queda pequeña siempre podéis ir al pueblo de al lado. No nos pongamos barreras. No pasa nada. Se pueden olvidar viejas rencillas entre municipios vecinos (pasa en toda España, si no en todo el mundo) y visitar sus encantos. Seguro que no imagináis que tan cerca tenéis tantas opciones.

En geografía hay un concepto que se llama ciudad real. Así, en minúscula. Se refiere al área de influencia de una ciudad. Esta se puede extender hasta una distancia máxima de 50 minutos en cualquier transporte. Es un concepto que amplía las áreas metropolitanas, sobre todo alrededor de las grandes capitales. Aunque también podéis aplicarlo a vuestros municipios. Así, ahora que acabamos de ampliar vuestro radio de acción no tenéis excusa para encontrar nuevos lugares.


Esperamos que con todos estos consejos, si os quedáis unos días en casa durante las vacaciones, los aprovechéis en conocer cosas nuevas. Que está muy bien montar y colocar esa estantería que comprasteis hace unos meses y que está en un rincón estorbando. Pero también aprovechar para descansar y hacer cosas que normalmente no podemos. Además de montar una estantería.

Estos consejos no son mandamientos, como mucho una guía. Después deberéis adaptarlos a vuestra localidad y vuestro entorno. Por lo general lo que pretendemos es que conozcáis cosas nuevas en un entorno que es el habitual. Y, aunque no nos gusta la expresión, que salgáis un poco de vuestra zona de confort.

Ser turista en tu propia ciudad no solo es ahorrar en el alojamiento, también debe servir para descubrir y redescubrir nuestro entorno. Es una manera, también, de conocernos mejor a nosotros mismos.