lunes, 28 de septiembre de 2020

UNA VISITA A REUS: MODERNISMO Y VERMUT

Hacía tiempo que me apetecía visitar Reus. No sé si por su patrimonio arquitectónico. No sé si por la cantidad de personajes famosos, tanto históricos como actuales, que vio nacer esta ciudad. O por su secular enemistad con la cercana capital, que siempre me hace mucha gracia y suelo utilizar para "picar" o congraciarme con mi interlocutor. O por la rosa de su escudo, sospechosamente parecida a la que representaba a la Casa de Lancaster. No lo tengo claro. Pero sí que puedo afirmar que nos gustó mucho más de lo que esperábamos.

Empezamos nuestra ruta dirigiéndonos a la Plaza Mercadal, uno de los puntos centrales de Reus. Aquí vamos a encontrar varios edificios interesantes. Por una parte el Ayuntamiento, siempre de interés en cualquier municipio. Está en uno de los extremos de esta plaza casi cuadrangular. Es un edificio bastante sobrio, reconocible por el balcón sobre la puerta principal y, sobre todo, por el reloj en la torre que remata uno de los lados de la Casa Consistorial.

En otra de las esquinas de la plaza Mercadal encontramos el Gaudí Centre. Ya hemos comentado que Reus es lugar de nacimiento de numerosos personajes célebres, y uno de los reusenses más conocido, acaso el más universal, fue el arquitecto Antoni Gaudí. En su pueblo natal le dedican un espacio donde conoceremos mejor su vida y la evolución de su obra. El edificio, desde luego, no tiene nada que ver con las formas orgánicas que Gaudí insufló a su arquitectura. En esta ocasión hablamos de un edificio contemporáneo, con forma de cubo cerrado, en su mayor parte de color negro. Nada menos gaudiniano. En la planta a ras de calle se encuentra la oficina de turismo, donde nos podrán informar de las rutas para apreciar los monumentos y lugares de interés que existen en Reus. 

En otra de las esquinas de la plaza Mercadal se encuentra la Casa Navàs, popularmente conocida como "la guapa de Mercadal". Desde luego este apelativo se lo tiene merecido. Es el edificio modernista más bonito de Reus, y podría estar en cualquier ránquing de los mejores edificios modernistas de Europa. Por todos y cada uno de los detalles decorativos, que se han mantenido perfectamente conservados hasta nuestros días, merece mucho la pena la visita a su interior.

De la casa Navàs parte la Ruta Modernista de Reus. Nosotros intentamos seguir esta ruta pero con tres niños, que no estaban muy por la labor, hicimos lo que pudimos, aunque es cierto que pudimos completarlo en un porcentaje muy alto, más de lo que en ese mismo momento creíamos. El término "modernista" engloba una serie de movimientos artísticos que se van encadenando entre finales del XIX y principios del XX (art noveau, art decó, estilos regionalistas...). Muchas veces también se incluye en esta denominación algunas obras que aun teniendo elementos "modernistas" no pertenecerían a esta clasificación. Pero vamos a usar el término "modernista", sin ánimo de andar dando una masterclass aquí y ahora, porque creemos que más o menos todos tenemos presentes su estética. 


La ruta se dirige hacia la calle Monterols, en cuya esquina está el Gaudí Centre. En esta calle con un fuerte carácter comercial, como la mayoría de calles del centro de Reus, encontraremos varios edificios modernistas. Os recomendamos estar muy atentos a las fachadas, los balcones, las ventanas. Mirad más hacia arriba que hacia el suelo, porque vais a encontrar muchas cosas que os sorprenderán. 

Pronto llegaremos a la plaza de Prim, dedicada a Juan Prim, natal de Reus, uno de los españoles más influyentes de su momento y que fue nombrado Presidente del Gobierno en junio de 1869. Falleció apenas año y medio después por la infección que le produjo unas heridas de bala infligidas en un atentado. En 1971 sus restos fueron trasladados a Reus, donde reposan. Una estatua ecuestre preside la plaza caracterizando a Prim como general, obra de Lluís Puiggener, que realizó otra estatua ecuestre de Prim para el Parque de la Ciudadela de Barcelona, que causó una gran polémica por su parecido, y que fue destruida en 1936. 

Esta plaza es uno de los puntos neurálgicos de Reus. El teatro Fortuny tiene una presencia central, así como otros edificios como el Hotel de Londres, el antiguo Casino o el Círculo de Señores, que actualmente albergan oficinas o establecimientos comerciales. Desde esta plaza podemos seguir por la calle Llovera (recomendado), que continúa el trazado de Monterols, o bien la Calle de San Juan, que se abre en diagonal desde la plaza Prim. Nosotros elegimos San Juan. De todas maneras el recorrido recomendado vuelve a Prim, pero en sentido contrario al que realizamos. Nosotros somos así.

Por supuesto, seguiremos observando edificios modernistas en esta calle. Los más importantes son la Casa Rull (y sus jardines), la Casa Gasull (contigua a la anterior), y el antiguo Hospital de San Juan. También en esta calle podemos ver el Mercado Central de Reus, un edificio más actual, inaugurado en 1949. Al final de la calle San Juan, en su intersección con el Paseo de Sunyer se encuentra una de las fuentes más queridas de Reus, la de las Ocas. A nosotros nos resultó muy pequeña, sobre todo porque está en el centro de una rotonda de una vía con tres carriles y por la lejanía a la acera hace efecto de ser más pequeña.

Rodeando el mercado llegamos a la avenida de Prat de la Riba. Tras pasar por la Iglesia de San Juan Bautista podremos comprar en las tiendas que se encuentran en esta calle, algunos comercios conservan un sabor tradicional, con los alimentos más característicos de Reus. Al final de la calle veremos la Plaza del Pintor Fortuny, dedicada a otro de los ilustres hijos de Reus, uno de los mejores pintores españoles del XIX, al que también se le dedicó el teatro de la plaza Prim. Una estatua lo recuerda en su plaza, realizada por el escultor Josep Viladomat en 1948. Fortuny murió muy joven, con 36 años, en Roma, donde reposan sus restos excepto su corazón, que se encuentra en la Iglesia Prioral de San Pedro, en Reus, donde fue bautizado.

Desde aquí encaramos la calle Llovera para volver a la plaza Prim. Otra calle comercial y peatonal con numerosos edificios modernistas. Como dijimos en la calle Monterols: mirad hacia arriba, no al suelo. La Casa Boule con su magnífica fachada, la Farmacia Sans Porta, o las Casas Querol, Tomás Jordi o Punyed, todas obra del arquitecto Pere Caselles. El edificio más importante de la calle, el Palacio Bofarull, se encuentra a unos metros de la plaza Prim. Volveremos por la plaza Mercadal y enfilaremos la calle Mayor para llegar a la Iglesia Prioral de San Pedro

Esta parroquia es la más importante de Reus, consagrada al patrón de la ciudad. Fue construida en el s. XVI para sustituir una antigua iglesia que había quedado pequeña. Hija de su tiempo, fue realizada en estilo gótico tardío. Sobresale, nunca mejor dicho, su esbelto campanario, visible y reconocible desde muchos puntos de Reus. Como hemos dicho, aquí reposa el corazón del pintor Mariano Fortuny. Es el lugar donde tienen lugar los actos principales de las fiestas religiosas de Reus.

Si rodeamos la "prioral" llegaremos a la plaza de las Pescaderías Viejas, que a mediados del s. XIX se reformó con su actual aspecto. Este espacio es muy curioso. Está delimitado en sus dos extremos por una entrada a modo de arco de triunfo, rematado por un escudo y con esculturas de cestas con pescados, mariscos y carnes. En ambos laterales hay unos edificios de viviendas, iguales y simétricos. En los bajos tiene unas arcadas que resguardan los bares que se cobijan en su interior. Se supone que en este espacio estarían antes los puestos de pescado del mercado local, que se instalaba en la cercana plaza Mercadal. 

Ya solo nos quedaba callejear por el centro de Reus. Mirar los escaparates de sus tiendas típicas, sentarnos en una terraza. ¿Una terraza? Sí, porque no podemos irnos de Reus sin tomarnos un vermut. Esta bebida realizada con vino blanco macerado con hierbas, típico de los aperitivos, ha vuelto con fuerza, adaptándose a nuevos consumidores. O a lo mejor es mi entorno, que ya nos estamos haciendo mayores, jeje. En Reus hay una cultura del vermut muy fuerte y prácticamente todos los bares de Mercadal y alrededores lo ofertan. Es comprensible teniendo en cuenta que marcas como Miró, Yzaguirre o Muller son de Reus.

La manera típica de tomar el vermut es en un vaso con hielo, media rodaja de naranja amarga y dos aceitunas. Se acompaña de un plato de patatas fritas y otro de aceitunas o de avellanas de Reus (que tienen Denominación de Origen Protegida). Si queréis profundizar más en los secretos de esta bebida podéis visitar el Museo del Vermut o hacer una cata en alguna de las bodegas de vermuts de Reus.

Y de esta estupenda manera nos despedimos de Reus. Nos lo hemos pasado muy bien en una ciudad que tiene mucho por descubrir. Una ciudad que nos dejó a todos muy buen sabor de boca y ganas de repetir. Esperemos que podamos hacerlo pronto.

viernes, 18 de septiembre de 2020

9 CIUDADES EN ESPAÑA PARA VIAJAR CON LA FAMILIA

En este año tan sumamente atípico estamos redescubriendo nuestro país. Iniciativas como En Familia por España están haciendo que muchas familias se planteen visitar más algunos rincones que tenemos cerquita de casa. 

En redes sociales hemos visto muchas publicaciones que más o menos decían “este año no viajamos, nos quedamos en España”. Como si viajar por España no fuera viajar. En nuestro caso es más por una cuestión de logística y economía familiar que otras cuestiones. Tampoco queremos ser chovinistas. Esa frase tan manida de “para que ir al extranjero con la cantidad de cosas bonitas que hay en España” nos da bastante rabia porque es, en nuestra opinión, una paletada. En España hay lugares maravillosos, que no los vas a encontrar en otro sitio del mundo. Pero el resto del planeta tiene muchas maravillas por descubrir. 

Sea como sea, aún nos quedan unos cuantos puentes y fines de semana por delante. Para ello hemos realizado un listado de 9 ciudades en España que nos gustan mucho para visitar con niños. No las hemos ordenado de la que más nos gusta a la que menos. El orden es bastante aleatorio, así que no queráis ver un ránking si no un listado con el que queremos daros ideas: 

MADRID 


Ante la pregunta de que podemos encontrar en Madrid, la respuesta más lógica es ¿qué no podemos encontrar en Madrid? ¡Pero si hasta podemos encontrar un auténtico templo egipcio! Como capital de España que es tiene todos los recursos posibles. Y si no lo tienen están muy cerca. 

Uno de los imprescindibles de Madrid es el parque de El Retiro, el gran pulmón verde de la capital. Además es un sitio lleno de historia con un montón de actividades para hacer. Como amantes de los museos no podemos dejar de recomendar el Museo del Prado, la gran pinacoteca nacional y una de las mejores del mundo. Además las familias numerosas tenemos la entrada gratuita si lo visitamos la familia al completo. Otro gran parque es el del Oeste, junto al que se encuentra el Templo de Debod, ese templo egipcio que comentábamos antes. 

Uno de los grandes alicientes es el Parque Warner, que se encuentra a unos 30 kilómetros de la capital. El gran reclamo, además de las atracciones, es que cuenta con personajes de DC Comics, Looney Tunes y del universo de la Warner Bros. 

En este blog encontraréis unos cuantos artículos sobre lugares a los que ir con vuestros hijos. Y los que quedan. De hecho tenemos una lista bastante extensa de sitios pendientes, a la que cada vez se le suman nuevas propuestas. Empezamos a creer que jamás lograremos verlos todos. 


BARCELONA 


La capital catalana es una de las últimas ciudades que hemos recorrido junto a nuestros hijos. A pesar de los tópicos que se han ido asentando en los últimos años, es una ciudad abierta, amable y acogedora. En ningún problema hemos tenido problemas con la lengua, bien porque la hablamos, bien porque si pedimos que nos hablen en castellano lo hacen sin ninguna contrariedad. 

Las grandes estrellas de la ciudad son los edificios que proyectó el arquitecto Antoni Gaudí. El Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, el Parc Güell, la Pedrera, la Casa Milá… Edificios que son casi irreales, tan mágicos como inclasificables. 

Pero además es una ciudad con un magnífico barrio gótico, es cierto que con algunos añadidos posteriores, pero que no deja de ser una gozada para pasear entre edificios como la Catedral, con fama renovada gracias a la famosa novela de Ildefonso Falcones y su posterior adaptación a la serie. 

No olvidemos otros equipamientos como los que hay en la zona de Montjuic, tanto el MNAC, como la fuente mágica, como los protagonistas de los JJOO; un paseo por La Rambla y por el frente marítimo (si nos quedan fuerzas) o una visita al magnífico Cosmocaixa. En definitiva, una ciudad con mucho que descubrir. 

VALENCIA 


Esta es una ciudad casi perfecta para recorrerla con niños. El eje fundamental lo encontramos en el Jardín del Turia. Éste era el antiguo cauce del río Turia a su paso por la ciudad, y tras las devastadoras inundaciones de 1957 se decidió que se construiría un nuevo curso por fuera del casco urbano. En sus 7 kilómetros, y alrededores, nos ofrece una cantidad inmensa de recursos. 

Al inicio del “paso” del Turia por Valencia encontramos el Parque de Cabecera, un espacio de 330.000 m2. Destaca su lago central, que podemos recorrer con unas barcas de alquiler. Justo al lado se encuentra el Bioparc, el nuevo parque zoológico. Ambientado en África conviven unas 100 especies de animales, destacando los elefantes, leones, gorilas y las jirafas que ocupan la inmensa sabana central. En el otro extremo del Jardín del Turia se encuentra la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Este complejo lúdico y divulgativo es conocido en todo el mundo gracias a las arquitecturas diseñadas por Santiago Calatrava y Félix Candela. 

¿Más recomendaciones? No podemos dejar de aconsejaros una visita por el centro histórico, que es enorme, por cierto. La Plaza de la Virgen con el Palacio de la Generalitat, la Basílica de la Virgen de los Desamparados y la fachada gótica de la Catedral; la Plaza del Ayuntamiento, tan llena de vida; la hermosísima Estación del Norte; las puertas de Serrano y Quart, tras pasear por la calle Caballeros; el Mercado Central y la Lonja de la Seda… 

Y por supuesto una visita al Parque Natural de la Albufera. No solo por el hermoso lago, también porque dentro de los márgenes de La Albufera se encuentra El Palmar, una pedanía de Valencia donde guardan las esencias de la gastronomía valenciana: la paella y el all i pebre. Además de recomendarlo para toda la familia, lo recomendamos para los cinco sentidos. 

SEVILLA 


Una de las ciudades más bonitas de España. Y una maravilla para visitarla con niños. En algunos momentos Sevilla se tomo como estereotipo para todo el país. El ejemplo más claro es el personaje de Carmen, esa mujer con carácter y arrojo que popularizaron la novela de Prosper Mérimée y la ópera de Georges Bizet. 

En el centro histórico, y a muy poca distancia, encontramos tres de los edificios monumentales más importantes de Sevilla: La Catedral, El Real Alcázar y el Archivo de Indias. Casi nada. Estos tres edificios son testigos de la importancia de Sevilla como Puerto de Indias a raíz del descubrimiento del “Nuevo Mundo” por parte de Cristóbal Colón. Si nos dejáis una recomendación muy especial, no os perdáis el Real Alcázar u os arrepentiréis mucho. 

Relativamente cerca encontramos uno de los espacios más emblemáticos de la capital hispalense: la Plaza de España. Centro de la Exposición Iberoamericana de 1929 (de la que se conserva algún pabellón todavía) es un edificio monumental que sorprende tanto al visitante primerizo como al que repite. Su uso como escenario en varias películas lo convierten, además, en un lugar de culto cinéfilo. Anexo se encuentra el parque de María Luisa, el más grande y conocido de la ciudad. Sus fuentes y cascadas, las esculturas y la frondosa vegetación invitan a un paseo sosegado y tranquilo. Como complemento encontramos el Museo de Artes y Costumbres populares y el Museo arqueológico, separados por la Plaza de América, espacios que también se construyeron para la Exposición Iberoamericana de 1929. 

Por último recomendar una visita a la isla de la Cartuja, isla fluvial del Guadalquivir, donde además de poder visitar el Monasterio que da nombre a esta parte de la ciudad, y que actualmente es sede del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, acoge también el parque temático Isla Mágica, que aprovecha los terrenos donde se instaló la Exposición Universal de 1992. Este parque fue bastante vilipendiado en su momento, pero aunque no lo hemos visitado, creemos que se puede pasar un día divertido en sus instalaciones. 

GRANADA 


Si Sevilla es bonita, no os quiero decir nada de Granada. ¿Puede ser nuestra ciudad española favorita? Puede serlo, perfectamente. ¿Por qué? Por todo: monumentos, gastronomía, espacios para niños, estilo de vida… 

Evidentemente gran parte de nuestra visita a Granada girará alrededor de La Alhambra, la gran ciudad palatina, uno de los mejores monumentos de España (por no ser exagerado y decir “del mundo”). Este es uno de esos lugares que te recuerdan que el ingenio humano no tiene límites y te empequeñece que con una tecnología que no es la que tenemos hoy en día pudieran construir edificios y estancias tan grandiosas. Obligatorio ir con niños. Obligatorio ver sus caras de asombro. 

Pero Granada es mucho más que La Alhambra. El barrio del Albaicín está a la par en popularidad, con el mirador de San Nicolás y sus puestas de sol a la cabeza. Pero no es menos recomendable visitar el centro de la ciudad, el entorno d ella Catedral, la Capilla Real y el laberíntico barrio de la Alcaicería. Y por suuesto dejarse llevar por el tercer elemento capital en Granada: son sus bares de tapas. Son de sus epicentros se encuentran en la calle Elvira y en la calle Navas. 

Además de lo más típico Granada tiene otros elementos de interés, sobre todo para niños, como el Parque de las ciencias o el parque Federico García Lorca, donde se encuentra la Huerta de San Vicente, que fue propiedad de la familia del poeta y que hoy es una casa-museo. 


TARRAGONA 


Poco imaginaban (suponemos) los habitantes de la Colonia Iulia Urbs Triumphalis Tarraco que más de 2000 años después seguiríamos hablando de ellos y pisando las piedras con las que construyeron sus edificios. Pero es así y Tarragona es una ciudad magnífica para visitar con toda la familia. 

Ha dejado de ser un recurso más que visitar desde Barcelona (que se encuentra a menos de 100 kilómetros) para ser un destino turístico con muchas posibilidades. En el año 2000 la Unesco declaró Patrimonio de la Humanidad al conjunto arqueológico de Tarraco, que cuenta con restos de edificios como un magnífico anfiteatro, foros, el circo, un teatro, o las murallas. 

Pero no solo de Roma vive Tarragona, un paseo por la Rambla Nova hasta llegar al famoso Balcón del Mediterráneo, disfrutar de sus playas o un recorrido por el barrio del Serrallo, el antiguo barrio de pescadores, harán que nos enamoremos más si cabe de esta ciudad. 

Y como no, visitar el que para nosotros es el mejor parque temático de España: Port Aventura. Apenas a 11 kilómetros del centro de Tarragona, es el lugar ideal para toda la familia. Sus atracciones, sus espectáculos, su magnífica tematización… En definitiva, no hay excusa para no hacer una escapada a Tarragona. 

SEGOVIA 


Internacionalmente conocida por su acueducto romano y por su tradicional cochinillo asado, Segovia merece una visita por muchas otras cosas. Como en otros centros históricos, su peatonalización permite a las familias pasear sin tener que preocuparse en exceso (siempre queda algún coche por ahí). 

Si queremos sentirnos en un cuento de hadas deberemos visitar el Alcázar segoviano. No lo decimos por decir, ya que esta fortaleza medieval inspiró a Disney en el diseño del castillo de Blancanieves. Sea como sea, el edificio es espectacular y vale mucho la pena visitarlo. Magníficamente restaurado y conservado, en parte por su uso continuado. Si observarlo desde abajo del promontorio sobre el que se levanta es espectacular, no lo es menos desde su acceso, con la torre de Juan II en todo su esplendor. 

Otro de los puntos más interesantes de Segovia es su Plaza Mayor. Aquí encontramos el Teatro Juan Bravo, el Ayuntamiento y la cabecera de su Catedral. Bajo los soportales hay un montón de bares y restaurantes donde degustar la gastronomía segoviana más allá de sus asadores. 

Porque Segovia es un lugar donde se come fabulosamente. Sus excelentes carnes, con el consabido cochinillo, se complementan con un buen guiso de judiones o la dulzura casi pecaminosa de su ponche segoviano, un postre realizado con un bizcocho empapado en almíbar, con crema de yema y coronado por mazapán. Tan lesivo para la Operación Bikini, como satisfactorio para nuestro paladar. 

TERUEL 


Un ejemplo perfecto de que por ser una ciudad pequeña no deja de ser interesante. Teruel, la capital de provincia con menor número de habitantes de España, lleva unos cuantos años posicionándose turísticamente y es una opción muy interesante para toda la familia

Su centro histórico es una gozada para ser paseado. Gran parte de culpa la tiene su arquitectura mudéjar, que se deja ver en edificios como la Catedral o las torres de El Salvador, San Pedro y San Martín. También un lugar tan emblemático como la Plaza del Torico, verdadero centro neurálgico de la vida turolense. También hay que citar la preciosa escalinata del Paseo del Óvalo, que conectó Teruel con el ferrocarril, y todo lo concerniente a la leyenda de Juan e Isabel, los famosos amantes de Teruel (ríete tú de Romeo y Julieta), incluido su supuesto sepulcro. 

Pero el gran impulso de Teruel llegó de la mano de Dinópolis. La Diputación supo aprovechar los descubrimientos científicos realizados en los yacimientos paleontológicos diseminados por toda la provincia, y se supo subir a la ola de la dinomanía (una ola que parece que no baja) para abrir un parque temático, con subsedes en distintos municipios de la provincia, que es una maravilla y una gozada. Además de ser muy divertido, aprendes un montón de cosas. 

Por si fuera poco en la de Teruel hay unos pueblos preciosos, que por si mismos merecen una visita. Albarracín y su entorno, Rubielos de Mora (y su vecina Mora de Rubielos), Valderrobles o Mirambel. La oferta en invierno se complementa con las dos estaciones de esquí en la comarca de Gúdar-Javalambre. Más es imposible. 

BENIDORM 


Es nuestra patria chica y no podía faltar en esta selección de ciudades para visitar en familia. Para que no nos acuséis de barrer para casa porque sí, os vamos a hacer un ligero resumen: cinco parques temáticos (uno de “atracciones”, dos parques acuáticos y dos parques de animales) más de 5 kilómetros de playas urbanas, un parque natural marítimo terrestre, más de 85.000 plazas de alojamiento sumando hoteles, hostales, apartamentos y campings. Vaya, que el que no viene a Benidorm es porque no quiere. 

Benidorm es mucho más un destino abarrotado y playas de bote en bote. Fuera de la temporada alta, es un lugar muy habitable y bastante tranquilo. Apenas hay aglomeraciones de tráfico y se puede llegar andando a prácticamente cualquier lugar de la ciudad en poco tiempo. Los que vivimos aquí sabemos que el transporte público es un horror, pero oye, si tienes tiempo… 

Cada persona puede encontrar algo que hacer en Benidorm, configurar sus vacaciones prácticamente a medida. Hay un montón de tiendas, rutas cicloturísticas, recorridos senderistas, salones de escape room, bares y restaurantes tanto nacionales como internacionales. También puedes quedarte en tu alojamiento descansando y sin hacer ni el huevo. 

Si echáis algo en falta seguramente los pueblos cercanos complementarán la oferta. Altea con su aire bohemio, La Vila Joiosa con sus casas de colores y sus fábricas de chocolate, el Castell de Guadalest con su centro histórico y su embalse, pueblos con encanto como Polop o La Nucia, Alicante con museos y un sinfín de espacios por descubrir… Como veis hay mil oportunidades para disfrutar. 


Estas son nuestras 9 ciudades favoritas para visitar con la familia. Sabemos que nos hemos dejado muchas que merecerían estar sin ninguna duda en este listado. Toledo, Valladolid, Peñíscola, Salamanca o Girona son solo algunos ejemplos de los muchos que tenemos en toda la geografía española. Hemos priorizado capitales de provincia por la mayor cantidad de recursos que tienen aunque, como veis, también hemos contado con sus entornos. Como no, os animamos a visitarlas todas y a que nos dejéis en comentarios vuestra opinión sobre este listado.

martes, 8 de septiembre de 2020

PICNIC EN EL ÁREA RECREATIVA DE VICTORIA ROJAS DE AIGÜES

Hace unas semanas organizamos una excursión por nuestra propia provincia. Ya sabéis, no hace falta que descubramos nada acerca de las opciones de este verano (y lo que te rondaré). Después de andar buscando durante un rato (fundamentalmente en otros blogs) nos decidimos por acudir al área recreativa más cercana al destino final de nuestra excursión: el área recreativa de Victoria Rojas, en Aigües de Busot.


Aigües de Busot (o simplemente Aigües) es una localidad cercana a Alicante, a poco más de 20 kilómetros de la capital. Esta localidad se empieza a adentrar en el interior de la provincia, que muy cerca del mar ya tiene un importante componente montañoso. De hecho desde Aigües parte una de las rutas senderistas que recorren el Cabeçó d’Or, uno de los lugares favoritos en la provincia para practicar este deporte. En el mismo área hay un panel con información de las rutas.

Lo primero que debemos tener en cuenta es no confundir Aigües con Busot, ya que, aunque son dos municipios cercanos (unos 11 kilómetros entre uno y otro), son independientes. Para llegar a Aigües tomaremos la carretera CV-775 desde El Campello. También la CV-773 conecta desde Busot y otras carreteras secundarias que parten de los municipios cercanos como Mutxamel (Muchamiel). Son carreteras de montaña, bastante reviradas y que los fines de semana (si hay buen tiempo) suelen ser utilizadas por aficionados al ciclismo, así que llevad la máxima precaución del mundo. Por otra parte la carretera es muy chula porque tiene unas vistas fenomenales del Mediterráneo.


Apenas 500 metros antes de llegar al núcleo urbano de Aigües encontraremos al lado izquierdo de la carretera, en dirección Busot, el área recreativa de Victoria Rojas. Esta es un área no muy grande. Tiene cuatro terrazas en las que están dispuestos los diversos servicios que ofrece: aparcamiento, una pérgola sobre una mesa y asientos, baños, mesas de picnic, barbacoas-paelleros, una fuente de agua y aparatos de gimnasia (para practicar calistenia, concretamente).


Para nosotros es un poco fastidio que no haya juegos infantiles (columpios, para entendernos), pero aquí hay bastante sitio para que los niños jueguen. Llegamos un poco tarde y las únicas mesas de picnic que estaban en la sombra estaban ocupadas. Por suerte llevábamos una manta de picnic plástica y pudimos ponernos a la sombra, ya que el sol caía a plomo. De ahí que recomendemos siempre acudir pronto a las áreas recreativas, sobre todo los fines de semana y festivos. Por suerte había muy poca gente y no tuvimos problemas de espacio. Además al poco tiempo de estar allí la familia que estaba en las mesas protegidas por la pérgola se fue y pudimos trasladarnos. Sin lugar a dudas es el mejor lugar de toda el área recreativa.


Las barbacoas-paelleros estaban cerrados y era absolutamente imposible utilizarlos. Nosotros llevábamos la comida ya preparada y no los necesitábamos. Traemos esto a colación porque es muy importante no hacer el cenutrio en la montaña y que una grave imprudencia pueda provocar un incendio forestal.

Los baños estaban abiertos y eran perfectamente utilizables. Además se encontraban muy bien cuidados, limpios y sin desperfectos importantes. Da mucha rabia ir a un lugar público y encontrártelo en mal estado, ya sea por dejadez de quien debe de mantenerlo en óptimas condiciones, o por vandalismo de la gente que sólo encuentra diversión destrozando lo que es de todos. Os daréis cuenta que nos hemos encontrado con bastantes situaciones desagradables, y además de rabia provoca mucha tristeza.


En la parte más alta del área recreativa se han plantado en varios niveles de terrazas un montón de árboles (nos pareció que eran olivos) que aportarán un plus de sombra a esta zona. Aunque también se lanzó la hipótesis de que fuera un vivero municipal, pero no hemos encontrado información al respecto. No es que el área recreativa sea un secarral, ya que está rodeada de pinos, pero siempre está bien que se aumente la masa arbórea.


Hablando de pinos, muy cerquita se encuentra un ejemplar que popularmente se conoce como “Pino Manolo”. Se cuenta que tiene unos 150 años. No lo sabemos, pero sí que podemos deciros que es enorme, con un tronco bastante grueso. Está muy cerca del área recreativa, aunque hay que andar un poco por la carretera y no hay aceras ni paso de peatones.


Volvemos ahora a la parte más alta del área recreativa. Al fondo se ve un edificio, solitario y señorial. Es el antiguo Preventorio de Aigües. Este edificio nació como un balneario a principios del siglo XIX. La sierra del Cabeçó d’Or tiene bastantes acuíferos, algunos de los cuales tienen propiedades termales. De hecho el “or” (oro) del nombre es una mala traducción, ya que los musulmanes que habitaban por aquí mantuvieron el término íbero “ur” para esta sierra, que significa “agua” y los conquistadores cristianos confundieron la voz. Buscaron oro y no lo encontraron, agua sí, como veis.

Si por algo es famoso el Preventorio es por las supuestas apariciones de espíritus, fantasmas y otras apariciones aterradoras; por sucesos extraños e inexplicables. Es un lugar donde son habituales las visitas de los amantes del misterio, de lo paranormal. Para entendernos, el equipo del programa de Iker Jiménez pasó una noche aquí.


También los vándalos (los gamberros, no el pueblo germánico) han visitado habitualmente este edificio. Por todo ello, y porque amenaza ruina, los accesos fueron cerrados. El edificio, al menos desde lejos, conserva un aire señorial y tiene una estructura bonita. La lástima es que está en muy malas condiciones y quizás el tiempo dicte sentencia.

Con todo, el área recreativa Victoria Rojas es un buen punto para pasar un día. Tiene lo esencial para disfrutar de un picnic, y dependiendo de la época del año y las condiciones meteorológicas y ambientales, probar una buena barbacoa. Para eso es imprescindible consultar la web municipal y la de la Conselleria de Medio Ambiente para saber si está autorizado realizar fuego.


También las áreas recreativas suelen ser un muy buen recurso como punto de inicio (o final) para realizar rutas senderistas o para descansar durante una visita por los alrededores. Nosotros somos usuarios de estas áreas y os animamos a visitarlas, además, generalmente, están en lugares muy chulos.