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miércoles, 18 de agosto de 2021

DESCUBRIMOS EL ANTIGUO ALMACEN DE DIENTES DEL RATÓN PÉREZ EN VALENCIA

Hay un momento en la vida en el que deseas que se te caigan todos los dientes. Evidentemente esto ocurre cuando eres niño y deseas que ese diente que por la noche colocas debajo de la almohada, por la mañana se haya convertido en dinero o un regalo. Eso es posible gracias al Ratón Pérez. En este post os vamos a explicar que hace el Ratón Pérez con los dientes y donde.

El Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez

Para conocer esto tendremos que dirigirnos a Valencia concretamente al número 16 de la calle Borrull. Aquí se encuentra el Antiguo Almacén de Dientes. Este establecimiento nos permitirá, de la mano de Paula y Nando, descubrir que ocurre a partir del momento en el que el Ratón Pérez visita nuestra cama.

Hace ya bastante tiempo, uno de los primeros post que publicamos en este blog, os hablamos de la Casa-Museo del Ratón Pérez. Esta se encuentra en Madrid la calle Arenal número 8, en el mismo lugar donde lo sitúa el cuento escrito por el Padre Coloma para entretener al joven rey Alfonso XIII. Bien, esta vez visitaremos lo que podríamos denominar el área de trabajo del Ratón Pérez y sus compañeros.


La visita a este Antiguo Almacén de Dientes es muy especial y guarda numerosas sorpresas, por lo que vamos a intentar contar lo máximo posible de nuestra visita sin hacer ningún spoiler e intentando conservar la mayor parte de las sorpresas que conoceréis únicamente visitando este lugar.

¿Qué es el Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez? Bueno pues por su nombre habéis adivinado que un almacén donde van todos los dientes que se caen y que va recogiendo en casa de cada niño o niña. Aquí se someten a un proceso de clasificación. Dependiendo del estado de conservación de cada diente y, en caso de que necesite un trabajo extra porque el niño o niña en cuestión no se ha lavado los dientes como debiera, el tratamiento que conlleva es distinto.

El Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez

En primer lugar conoceremos la historia de este lugar tan especial y porqué se sitúa precisamente aquí, en el centro de la ciudad de Valencia. A continuación conoceremos cómo llegan aquí miles y miles de dientes procedentes de toda Europa y que han de ser tratados como ya os hemos contado anteriormente.

Para conocer este tratamiento vamos a ver la maquinaria necesaria para llevar a cabo todo el proceso que es un técnica que requiere de un cierto tiempo. También descubriremos cómo funcionan las distintas máquinas que se utilizan. Para esto ayuda el esquema que hay en una de las paredes de la sala. En esta misma habitación hay un mapamundi donde se encuentran todos los ayudantes y colaboradores que precisa el Ratón Pérez en su trabajo por todo el mundo.


Uno de los puntos más importantes en la visita es descubrir donde viven los ratones que ayudan al Ratón Pérez. Claro, su trabajo es muy duro y la verdad es que viven de lujo, con unas condiciones que para nosotros las quisiéramos. No les falta de nada ni siquiera una piscina para bañarse en verano.

Después de ver dónde viven los ratones se ve una máquina muy especial ya que es la que ayuda al Ratón Pérez y sus ayudantes para envolver los regalos que deja, en vez de dinero, debajo de la almohada cuando recoge un diente que se ha caído. Es una máquina un poco antigua pero que a pesar de los problemas que da sigue trabajando como el primer día.

El Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez

De vez en cuando aparece por el Antiguo Almacén de Dientes un ratón un poco trasto. Tanto es así que lo llaman el Ratón Travieso. Este ratón no se llama así por casualidad, sino porque suele hacer alguna travesura. Lo que pasa es que el pobre no es demasiado discreto y suele dejar pequeñas pistas que indican que ha estado por el Antiguo Almacén de Dientes.

Por último vamos a conocer un teatro en el que los ratones se entretienen cuando llega el fin de su jornada laboral. Quién sabe, si os habéis portado bien durante la visita podréis conocer a una persona, bueno un ratón, muy especial.


El Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez, como ya hemos comentado anteriormente, se encuentra en la calle Borrull número 16 de Valencia, en el centro de la ciudad. Para tener un elemento de referencia os diremos que está bastante cerca de las Torres de Quart apenas a 250 metros.

Podréis llegar perfectamente paseando desde el centro histórico de Valencia. Pero si estáis en otra zona de la ciudad podréis utilizar el transporte público. Por ejemplo, si vais en bus las líneas C1 y 28 tienen parada en la calle Guillem de Castro, junto a las Torres de Quart. Por otro lado las líneas 60, 62, 63, 64, 80 y 92 tienen parada en la Gran Vía Fernando el Católico, a 200 metros de nuestro destino. Si optáis por el metro, el Antiguo Almacén de Dientes se encuentra a 600 metros de las estaciones de Túria (líneas 1 y 2) y Àngel Guimerà (líneas 1, 2, 9, 5 y 3).

El Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez

Todas las visitas al Antiguo Almacén de Dientes están guiadas y debéis de sacar entrada con antelación para no quedaros sin poder visitar este lugar tan especial. Los precios generales son 7 euros, tanto los adultos como los niños. Las familias numerosas tenemos descuento (así como las familias monoparentales y las personas con diversidad funcional) y pagamos 6,30 €. Podéis consultar los horarios en su página web.

La visita dura alrededor de 50 minutos y la verdad es que Paula y Nando la hacen muy entretenida y muy divertida. En ningún momento los niños van a dejar de prestar atención ni se van a aburrir. Además cumplen escrupulosamente con la normativa anti-covid y en estos momentos los grupos guardan espacio entre sí. Durante toda la visita, además, es obligatorio llevar la mascarilla bien puesta además de utilizar gel desinfectante para las manos.


El Antiguo Almacén de Dientes es un lugar muy chulo para ir con niños especialmente de unos 4 o 5 años que es la edad en la que empiezan a caer los dientes de leche. Tiene una magia especial. Esta visita es complementaria a la de la Casa-Museo del Ratón Pérez en Madrid, que también hemos comentado anteriormente.

El Antiguo Almacén de Dientes del Ratón Pérez

Ahora es vuestro turno. Ahora os toca descubrir los secretos de este Antiguo Almacén de Dientes. La verdad que es bastante complicado intentar transmitir la magia de este sitio sin desvelar las múltiples sorpresas que os aguardan, pero estamos convencidos de que os va a encantar, sobre todo si en casa tenéis niños cuyos dientes de leche ya empiezan a moverse en la boca. 

jueves, 12 de octubre de 2017

UN LUGAR MÁGICO: LA CASA-MUSEO DEL RATÓN PÉREZ

"Vivía Ratón Pérez en la calle del Arenal, núm. 8, en los sótanos de Carlos Prats (sic), frente por frente de una gran pila de quesos de Gruyère, que ofrecían á la familia de Pérez, próxima y abastada despensa."


En 1894 el jesuita Luis Coloma escribió para el rey Alfonso XIII, al que se le había caido un diente y entonces tenía 8 años, un cuento sobre el Ratón Pérez. En el cuento el roedor conocía al rey Buby (apodo familiar del monarca) y juntos recorrían el espacio entre palacio y la casa de Pérez.
Precisamente en el numero 8 de la céntrica calle Arenal, muy cerca de la Puerta del Sol de Madrid, donde Coloma situó la residencia de la familia del conocido ratón en los bajos de la desaparecida Confitería Prast, se encuentra la Casa Museo del Ratón Pérez, un espacio que hace unos años abrió para dar a conocer y recordar a este simpático personaje que nos ha visitado a todos en alguna ocasión.
El museo consta de varias salas. En la primera de ellas se destaca la creación del Padre Luis Coloma y varios aspectos alrededor del propio autor, del personaje del Ratón Pérez y su familia, y del rey Buby, el trasunto de Alfonso XIII, coprotagonista del cuento. Además de conocer al Ratón Perez, descubriremos que este personaje tiene "colaboradores" en todo el mundo, como el Hada de los Dientes en los países anglosajones y Alemania, el ratón Topino (o Topolino) en Italia, u otras tradiciones en Euskadi o Cantabria. De hecho en el exterior del museo, en el lugar en el que se espera para poder entrar en la visita, hay paneles explicativos con la historia particular de cada uno de estos colaboradores y de sus tradiciones en los distintos países del mundo.
En la segunda sala, y gracias a los polvos mágicos, entraremos en el estudio en el que el Ratón Pérez descansa y lee las cartas que le escriben todos los niños que depositan su diente recién caído debajo de la almohada para que el Ratón Pérez lo recoja por la noche y lo cambié por una moneda o un regalo.
"[...] encontráronse frente á frente de una gran caja de galletas de Huntley.
Allí era donde vivía la familia de Ratón Pérez, bajo el pabellón de Carlos Prats (sic), tan á sus anchas y con tanta holgura, como pudo vivir la rata legendaria de la fábula, en el queso de Holanda."
Es en esta última sala donde veremos la caja de galletas Huntley dónde vive el Ratón Pérez junto a su familia, y si escuchamos atentamente probablemente podremos seguir los pasos del propio Ratón Pérez mientras se dirige de una estancia a otra protegiéndose de la vista de todos los niños. También descubriremos que hace con los dientes, aunque eso deberíais descubrirlo por vosotros mismos.
Para finalizar la visita llegaremos a un espacio que hace las veces de taquilla y tienda de recuerdos, donde podremos comprar objetos relacionados con el ratón Pérez y sus amigos. Toda la visita es guiada y las guías hacen que la visita cobre de más magia de la que ya por si contiene la Casa Museo del Ratón Pérez. Hay visitas cada 30 minutos, que es el tiempo medio en el que se realiza la visita a este museo. Aunque podemos permanecer más tiempo si así lo deseamos, al ser un espacio pequeño está un poco justo para cada uno de los grupos que realiza la visita, que tiene un número limitado de plazas. El precio único de cada ticket es de 3 €. Se paga desde los tres años y no hay ningún tipo de descuento.
Una cuestión que no es menor, el museo se encuentra en una primera planta y no hay ascensor, por lo que hay que subir por escaleras, incluso personas con movilidad reducida o carros de bebé.
El museo recomienda como edad idónea los cinco años. Nosotros recomendamos como edad máxima para poder visitar la Casa Museo del Ratón Pérez entre los 8 y los 9 años, que es la edad que tiene nuestro hijo mayor, aunque si el niño ya ha descubierto el verdadero secreto del Ratón Pérez puede que la visita sea un poco aburrida. Para los niños más pequeños la visita es muy entretenida y podemos ver la ilusión en sus caras a lo largo de todo el recorrido.
Por cierto, si creéis que el Ratón Pérez os va a visitar dentro de poco tenéis que cepillaros los dientes, puesto que no le gusta ir recogiendo dientes sucios de niños que no se los cepillan.