Mostrando entradas con la etiqueta juegos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta juegos. Mostrar todas las entradas

viernes, 18 de octubre de 2019

UN PASEO PARA CONOCER EL PARQUE CENTRAL DE VALENCIA

En la primera mitad del s. XIX un nuevo medio de transporte irrumpió para cambiar la forma en la que se viajaba y, ya que estábamos, se encargó de transformar las ciudades. El ferrocarril acercó distancias y sus raíles abrieron nuevos horizontes. Se crearon edificios (en algunos casos maravillosos) para que los pasajeros subieran y bajaran de los trenes y para otras actividades necesarias en la actividad ferroviaria. Pero cuando las ciudades empezaron a crecer el ferrocarril creó brechas.



Valencia no fue una excepción a esta historia. El tren llegó en 1851 y desde entonces fue parte fundamental de la ciudad. No en vano la Estación del Norte (aún en activo desde su inauguración en 1917) es uno de los edificios más representativos y bonitos de la ciudad. Con la mejora de las técnicas constructivas, que realizan túneles pasantes atravesando bajo tierra las poblaciones, y el traslado de talleres y almacenes a las actuales periferias, las zonas antes ocupadas por las vías han quedado sin uso.



En este sentido, en Valencia, se está llevando a cabo una importante transformación urbanística que va a permitir en los próximos años recuperar un espacio público para que la ciudadanía disfrute, y que donde antes existía una brecha ahora haya nuevas conexiones.



El Parque Central es el último parque que se ha abierto en Valencia, a finales de 2018, junto a las calles Filipinas, la plaza de Manuel Sanchis Guarner y el paso elevado de la Avenida de Giorgeta, al oeste del barrio de Ruzafa. Ocupa una superficie triangular que hasta hace muy poco ocupaban las instalaciones de servicios ferroviarios (talleres, almacenes, vías) que poco a poco se han trasladado o concentrando junto a las cercanas estaciones del Norte y Joaquín Sorolla.



Precisamente los antiguos edificios ferroviarios, muchos ideados por el arquitecto valenciano Demetrio Ribes, autor de la Estación del Norte de Valencia, y sus homónimas en Madrid (Príncipe Pío) y Barcelona, salpican este parque y se reutilizarán para equipar al barrio con diversos usos sociales, culturales y deportivos. El progresivo soterramiento de las vías ampliará la superficie del parque y transformará profundamente esta parte de la ciudad.


Uno de los grandes protagonistas de este parque es el agua, que aparece en numerosos puntos de este parque, con la idea inspirada por el poema de Ausiàs March “Aigua plena de seny" (agua llena de sensatez). Por una parque en estanques que rinden homenaje a líneas de tren que a lo largo del tiempo han ido desapareciendo, pero también circula por canales a modo de acequias (un elemento muy importante en Valencia) y en fuentes donde, a pesar de la prohibición de baño, se usan para mitigar los calores.


Pero siendo un parque los elementos vegetales también tienen una importante presencia. Se dividen en tres tipos de jardines, por una parte el Jardín de la Huerta, donde abundan plantas aromáticas y árboles frutales; por otra el Jardín Romántico, donde toma preeminencia el diseño y la función ornamental de la planta; por último el Jardín de las Flores, con un buen número de distintas clases de flores.



Si solo fuera un parque con fuentes y vegetación sería un poco aburrido, pero esto no ocurre aquí ya que cuenta con una zona de juegos infantiles y dos amplias praderas, una con dos rocódromos y otra donde se permite que haya perros. Un espacio en el que puede disfrutar toda la familia.




El Parque Central además de ser un espacio magnífico para el esparcimiento narra la historia del ferrocarril, un transporte que nos encanta a los románticos y que después de un declive ha resurgido por su sostenibilidad y rapidez frente al transporte por carretera o el avión. Diseñado por la paisajista estadounidense Kathryn Gustafson, que ganó un concurso internacional, seguro que os gustará tanto como a nosotros.

jueves, 29 de marzo de 2018

CASA TÁPENA: UN ÁREA RECREATIVA PARA TODA LA FAMILIA

Ahora que vuelve el buen tiempo, que los días alargan y cada vez anochece más tarde, apetece más salir de casa y disfrutar de un día relajado. Sin lugar a duda uno de los mejores lugares para disfrutar de un buen día son las áreas recreativas, una de las más chulas de la provincia de Alicante es Casa Tápena.


Casa Tápena se encuentra en Onil, Alicante. Para llegar lo más fácil es tomar la autovia A-7 que comunica Alicante y Alcoy tomar la salida 469 "Onil-Castalla" (si vamos dirección Alcoy) o 468 si vamos dirección Alicante, e ir hacia Onil y en la rotonda de entrada a Onil tomad la primera salida a la carretera CV – 803 dirección Banyeres de Mariola, siguiendo las señales hasta llegar (a unos 2 km.).

Esta área recreativa tiene varios espacios, dispuestos en terrazas, donde podremos realizar varias actividades. En el primer nivel o terraza encontramos el aparcamiento, con capacidad para al menos 50 coches, los paelleros, un bloque donde se sitúan los aseos, una zona de picnic, juegos infantiles para los pequeños y un kiosco-bar que abre fines de semana y festivos y ofrece bebidas, cafés, helados y algo de comer. En la zona de mesas no hay apenas sombra, por lo que si hace mucho calor no os recomendamos que os pongáis aquí.

En la segunda terraza hay otra zona de aparcamiento más pequeña, juegos infantiles para niños un poco más mayores, un par de pistas de petanca, y más mesas de picnic, pero a diferencia de las anteriores, aquí hay una inmensa arboleda y una zona de umbráculo que protege en los días más soleados. Además hay bastante espacio, por lo que los críos podrán jugar y correr a su libre albedrío.

En la siguiente terraza encontramos lo más característico de Casa Tápena, un inmenso laberinto vegetal en el que podemos pasar un buen rato jugando a perdernos y encontrarnos, jugando a encontrar el ciprés que hay en el centro e intentando salir de nuevo de este laberinto. Aunque no lo parezca este laberinto es muy divertido y podemos llegar a sentirnos como el minotauro (o como Teseo). Junto al laberinto han instalado unas parabólicas que hacen que aunque estén separadas bastantes metros se oiga perfectamente de una a la otra.

Pero además el área recreativa Casa Tápena funciona como un aula de la naturaleza y crean varios espacios para enseñar a los niños la diversidad de unos espacios vegetales frente a otros. Concretamente podemos encontrar un terreno agrícola, una zona de humedal un terreno lacustre junto a una balsa y un bosque mediterráneo con decenas de pinos que rodea a esta zona punto por aquí podemos dar un buen paseo los árboles trabajando los distintos hábitats vegetales. De hecho los coles organizan excursiones a este espacio.

A nosotros Casa Tápena nos gusta mucho. Hemos ido varias veces y la verdad es que los niños se lo pasan muy bien, tanto en los juegos infantiles como en el laberinto, donde todos acabamos jugando, incluso los yayos. Una recomendación antes de ir, preguntad si se puede hacer fuego en los paelleros ya que nosotros hemos ido un poco a contrapié, alguna vez hemos ido con intención de comer de barbacoa y estaban clausurados y otras veces que hemos llevado comida estaban abiertos para su uso.

Además, por si fuera poco, junto al área de Casa Tápena se encuentra la ermita de Santa Ana que también tiene una zona para picnic y juegos infantiles, además de aseos. La zona da para una buena caminata y así abrir el apetito...o para bajar la comida.

Aunque bastante sitio os recomendamos que si queréis ir no vayáis muy tarde, ya que a pesar de que hay mucho espacio, se llena con facilidad. No dudéis en ir, no hay excusa para no pasar un dia tranquilo en familia.