Mostrando entradas con la etiqueta escalada. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta escalada. Mostrar todas las entradas

viernes, 28 de agosto de 2020

EN HAPIK VALENCIA LLEGAMOS A LO MÁS ALTO

Desde hace un tiempo teníamos ganas de probar un nuevo lugar que aúna dos de las características principales que buscamos en cualquier lugar al que queremos ir con nuestros hijos: diversión y cansancio. Este lugar se llama Hapik. ¿Queréis conocerlo?

Hapik Valencia

Hapik es un parque de ocio con un montón de rocódromos indoor para escalar. Se dividen en dos niveles de dificultad. Si no estáis muy acostumbrados a escalar, como nosotros, os parecerá que la dificultad es difícil y muy difícil, pero al poco ya empezareis a trepar como gatos.


Nada más entrar se ven unas cuantas estructuras para escalar y unos puentes de cuerdas que cruzan el local a unos cuantos metros de altura. Luego entraremos en que son estos puentes. También un pequeño kiosco con aperitivos y bebidas, donde nos reciben. Aquí hay gel hidroalcohólico para desinfectarse. Porque en Hapik fueron muy escrupulosos con las medidas higiénicas para evitar el coronavirus.

Tras comprobar nuestra reserva pasamos al punto donde te ponen un arnés de seguridad y dan una charla explicando las medidas de seguridad a seguir para evitar accidentes. Os recomendamos que reservéis previamente a través de la web de Hapik, ya que el aforo está limitado por motivos sanitarios.


Pero no os asustéis porque Hapik es muy seguro, en todos los sentidos. En primer lugar, hay un montón de dispensadores de desinfectante en la zona de escalada. Tened cuidado y antes de empezar a escalar un rocódromo esperad a que el gel está completamente seco para que no os resbaléis. Pero la verdadera seguridad viene en los cables que se enganchan a los arneses que llevan todos los participantes. Este cable está unido a una especie de cabestrante con freno magnético, por lo que si quieres bajar o te caes, te frena y llegas al suelo haciendo rápel.


Bajar es la mayor dificultad en Hapik. Pero no por el sistema, sino por uno mismo. Yo fui el primero que dudé la primera vez que debía bajar lanzándome, ya que no me acaba de fiar, pero el sistema funciona perfectamente y después de acostumbrarte lo disfrutas más que la propia escalada.


Respecto a la escalada: son muros de ocho metros de alto. Tanto padres como hijos pueden escalar. Y de hecho deben escalar, porque es muy divertido. No solo hay rocódromos en las paredes, también una serie de estructuras exentas. Yo me quedé con las ganas de probar la única zona de escalada que no necesita las manos, que bautizamos como “los tubos de Super Mario".


Si creéis como yo que 8 metros no es mucho, probad a escalar. Y es que en algunos cuerpos (el mío, lo confieso) el confinamiento ha dejado olvidado algún kilo de más. Pero con paciencia y tesón lograreis llegar a lo más alto. Como hemos comentado, al principio no es fácil, pero una vez hayamos calentado y tengamos confianza (la técnica es lo de menos) treparemos como gatos.


Ya hemos dicho que hay dos niveles de dificultad. También cada persona debe saber si puede, si los agarres se adaptan a su estilo, etc. También es un tema de gustos, y si me apuráis de competitividad. Porque hay varios rocódromos enfrentados. Destaca uno que es un policarbonato transparente, en el que dos personas pueden verse cara a cara mientras escalan. O los dos rocódromos que tienen un cronómetro. Hay una pizarra con los récords en éstos. No, nos quedamos a años-luz de entrar. Pero somos muy del barón Pierre de Coubertin y lo importante es participar.


Si llegáis a lo más alto de tres rocódromos… ¡premio! Podéis acceder a la parte de multiaventura. ¿Recordáis lo de los puentes que cruzan el local? Pues eso mismo. La verdad que es muy divertido. Y muchísimo menos cansado que escalar, para que vamos a engañarnos. Está a varios metros del suelo, eso sí, pero las medidas de seguridad evitarán que caigamos. Hay puentes de varios tipos: de cable de acero, de plataformas, de red de cuerdas, tibetanos… Hay dos recorridos, uno corto y otro largo, que tiene una tirolina. Nosotros hicimos el corto, aunque queríamos hacer el largo, pero se acabó el tiempo de la sesión y no pudimos.


No se necesita de ningún tipo de equipo especial para escalar en Hapik. Únicamente zapatillas de deporte y ropa cómoda. A mi hija, que iba con pantalón corto (como todos, por otra parte) el arnés le rozaba y le hizo una pequeña rojez en la parte posterior de un muslo, sin importancia. La próxima vez iremos con chándal y listo.

La actividad dura una hora, más 15 minutos de charla de seguridad. Desde 11,50 € podréis disfrutar de este centro. Tienen otras ofertas como bonos y también celebran cumpleaños. Hapik está en Alfafar (Valencia) en ese megaparque comercial que está a caballo entre los términos municipales de Sedaví, Alfafar Massanassa, Benetusser, etc. Concretamente está en la manzana que ocupa el Centro Comercial MN4, pero junto a la autovía V-31 (la pista de Silla), al lado de Prenatal.


Fuimos con unas expectativas muy altas y… ¡las cumplimos! Nos lo pasamos muy bien. No creíamos que pudieramos hacer tantas cosas en una hora y te da un subidón de ánimo. Dentro de un tiempo, cuando estemos totalmente recuperados, repetiremos la experiencia.